El perder un familiar o amigo trae un vacío y profundo dolor en nuestras vidas, sin embargo, la promesa de hoy nos inyecta con esperanza eterna y gozo inefable por medio de Jesucristo. Recuerda que cuando muera y desaparezca de este mundo, solo habrá un breve tiempo de separación antes de vernos otra vez en el Reino de nuestro Señor y Salvador.
Les digo la verdad, ustedes llorarán y se lamentarán por lo que va a sucederme, pero el mundo se alegrará. Ustedes se lamentarán, pero su dolor se convertirá de pronto en una alegría maravillosa. Juan 16:20 NTV
Oración de hoy
Jesús convierte mi tristeza en alegría. Pongo mi confianza en Ti Señor Jesús y oro por fuerza en tiempos de luto y padecimiento. Llena mi corazón de alegría en recordar Tu victoria en la Cruz sobre la muerte y los poderes de tinieblas. Ayúdame en traer consolación a personas que lloran por perder un familiar para que sean tocados por Tu amor perfecto y abundante gracia. Ruego esto, en Tu nombre. Amén
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